Cuando las canciones hablan de ti

30.4.07

Mi paseo

Siempre que salgo a dar una vuelta por los alrededores me pasa igual. Esta es una zona de Madrid poco afortunada, en general, tiene una imagen más bien pobretona, y se ha abusado mucho en todos los sentidos. Aún así quedan espacios protegidos y es en esos sitios donde suelo dar mis escasos paseos. El de ayer no lo conocía, se trata del tramo final del río Manzanares, los últimos tres o cuatro kilómetros antes de encontrarse con el Jarama, donde vacía sus aguas, ya "limpias" tras pasar por varias depuradoras, en el término municipal de Rivas-Vaciamadrid. En contra de lo que pensaba, por aquí el río ya no apesta sino huele. Lo que vi y sentí ayer no puedo describirlo aunque si tuviera que utilizar una palabra, esta sería PAZ.

Yo de bichos no entiendo nada. Lo único que reconozco por aquí son las cigüeñas, los milanos y los conejos (que confundo habitualmente con las liebres). Era impresionante andar por allí, solo, con ese sonido ambiente, a cada paso se iban cruzando conejos por el camino, cada vez que me asomaba al río se oía un ruido de alas emprendiendo el vuelo, yo creo que la mayoría eran ánades reales, pero ya te digo que no tengo ni idea. A lo lejos se veía una pequeña colonia de milanos cazando por encima del río, haciendo unos picados velocísimos. Las cigüeñas con su trajín de un lado para otro acarreando ramas y otras cosas para remendar sus nidos, los nidos que ya están permanentemente ocupados, por turnos, empollando esos huevos que deben estar a punto de romperse.

La variedad de árboles y plantas también es muchísima. Álamos, sauces, chopos, plátanos, incluso alguno de los últimos olmos que se pueden ver por estas tierras. Cañas, carrizo, juncos, retama, cardos, thapsias, ortigas, amapolas, y cientos de florecillas de nombre desconocido para mí hacen un verdadero espectáculo de la naturaleza.

Pero lo más llamativo era el sonido; los gorriones, golondrinas, las palomas, el cuco, las urracas, las moscas, los grillos, las abejas y miles de sonidos más que no reconozco pero que me hacían parar a cada momento a escuchar y disfrutar. No hice muchas fotos porque cuando los sentidos se llenan de la forma que se me llenaron ayer es imposible concentrarse en algo diferente. De todas formas me alegro de haber sido capaz de hacer unas cuantas fotos y, sobre todo, de haber podido grabar esta banda sonora maravillosa. Algo así hay que vivirlo, pero si además lo puedes guardar para siempre en algún soporte más duradero que mi memoria (tan frágil)… qué más puedo decir. Que me encanta también compartirlo.




PD: Por primera vez en la vida de este blog, hoy no hay canción, pero ¿quién necesita hoy una canción? Yo no.

25.4.07

Mi jugador favorito

Hace tiempo que quería hacer un pequeño homenaje al bueno de Samuel, no va mucho con el estilo del blog pero como últimamente no salen las palabras aprovecho la canción para dar la bienvenida a la última visitante.

Canción para hoy: Eto'o - La Granja

10.4.07

Sombrero

Aunque la mayoría de los días la simpleza de mis pensamientos dejaría a Perogrullo a la altura de los pensadores griegos, hay otros que no me entiendo ni yo. Afortunadamente no son muchos y mi necedad acaba saliendo a flote por encima de esa parte femenina.

Nunca me había fijado en la etimología de la palabra sombrero. Y me encanta.

Canción para hoy: The damage in your heart - Weezer

2.4.07

Buen menú

Ante la sequía goleadora de las últimas jornadas y dado que no corren buenos tiempos para la lírica, me complace presentaros una nueva sección gastronómica llamada buen menú. Para inaugurar tan ilustre sección os presento una receta de mi invención (no se admiten reclamaciones, yo no os he obligado a hacerlo y menos a comerlo).

Bacalao al horno con Salmorejo cordobés

Ingredientes (para 4 personas): Una cebolla, cuatro hermosos lomos de bacalao, un huevo, una cantidad indeterminada de Salmorejo.

Preparación: Se cortará la cebolla en tiras que se depositarán en una tartera con un chorro de aceite de oliva virgen extra. Encima de la cebolla dispondremos los lomos de bacalao con la piel hacia abajo. El bacalao se habrá desalado previamente sumergido en agua durante no menos de día y medio (preferiblemente dos días) cambiando el agua de vez en cuando, al menos tres veces.
Calentaremos el horno a 200º y asaremos el bacalao durante 15 minutos aproximadamente. Transcurrido este tiempo, untaremos la parte de arriba de los lomos con clara de huevo y perejil y gratinaremos durante 5 minutos más.
Sacar a punto para comer y acompañar en cada plato con la cantidad adecuada de Salmorejo cordobés (no confundir con la porra antequerana, igualmente deliciosa por otra parte).

Consejo nº 1: no racanear con el salmorejo, la foto no es significativa, si ponéis una cantidad similar a la de la foto provocaréis un motín o que vuestros invitados no vuelvan a hablaros en una temporada.

Consejo nº 2: disponer de una cantidad importante de Salmorejo cordobés ya que de otra forma los comensales acabarán pasando la lengua por el fondo del plato y eso no queda nada elegante.

Consejo nº 3: si no disponéis de un buen bacalao, cocer unos huevos y acompañar con ellos unos buenos tazones de Salmorejo, también combina bien con patatas fritas, taquitos de jamón, incluso con unos gajos de naranja.

Acompañar con vino con carácter, por ejemplo, Estola, reserva 2001, D.O. La Mancha (Villarrobledo)

De postre, recomiendo algo acorde con las fechas que corren, unas Torrijas (con perdón), y una copita de Rosoli.


Canción para hoy: El Menú - Golden Apple Quartet