Cuando las canciones hablan de ti

29.8.06

Felicidades

Recuerdo el primero de tus cumpleaños que pasamos juntos, yo acababa de volver de Holanda, todo el verano allí trabajando nos habían unido mucho, es gracioso, pero creo que fue ese verano separados lo que acabó de unirnos.
Yo volví por sorpresa, todavía recuerdo el brillo de tus ojos marrones al verme llegar, la emoción de ese abrazo, tu respiración entrecortada y tu sonrisa iluminando esa noche calurosa de verano. Aquellos días fueron mágicos, inolvidables. Después vinieron muchos más... Entonces eras una niña y hoy ya han pasado tantos años como los que cumplías aquel día, la mitad de nuestras vidas, mi niña de ojos marrones. Y me estremezco al oir las dos canciones que me han hecho escribir hoy, esto precisamente.

Canciones para hoy: Brown eyed girl - Van Morrison
La mitad de nuestras vidas - La Buena Vida

21.8.06

La mala no es

A la sombra del breve voladizo del tejado y la buganvilla alta y tupida, las páginas de la novela, frescas y alegres, van pasando casi sin darme cuenta y la joven costurera china me va enamorando al tiempo que Luo y su fiel amigo cautivan a sus oyentes con las historias prohibidas.
Ya se acerca el mediodía pero hace poco que el sol ha conseguido encaramarse a lo alto del risco. Un abejorro va pasando entre las flores y las hojas que me sirven de toldo, imponiendo su zumbido sobre la música suave que me acompaña y me mece.
De vez en cuando dos o tres caminantes me hacen levantar la vista, atraído por su cháchara animada al pasar por el camino, más allá del jardín de grava negra dominado por las tres palmeras donde anida el gavilán.
Más cerca, casi los podría tocar, las lagartijas de colores y los lagartos negros corretean entre las plantas extrañas del macetero y de vez en cuando se arriesgan a bajar al suelo, caliente ya por el sol y salpicado por algunas migas del desayuno, casi olvidado ya. Olfatean, vigilantes siempre, se acercan, recogen su trofeo y desaparecen al menor movimiento de mi pie. Una lagartija que tiene dos colas se ríe, huidiza, del gran lagarto negro que parece mirar con autoridad a todos los demás.
Creo que Gerald Durrell también habría sido feliz aquí.
El pajarito diminuto lo mira todo desde la rama de ese rosal, sin decir nada. Yo lo miro, él me mira y sólo cuando me guiñas el ojo me doy cuenta de que eres tú, que no has querido perderte esta preciosa mañana.

Canción para hoy: Por la mañana - La Buena Vida

20.8.06

Nostalgia

"... sintió en cambio una gran nostalgia, no sabría decir de qué, pero era una gran nostalgia de una vida pasada y de una vida futura, sostiene Pereira".

No sé porqué pero esa noche de viernes supe que estabas pensando en mí y traté de imaginar cómo eras. A lo lejos se oye el ruido de las olas golpeando suavemente contra el acantilado negro. Casi se puede ver la espuma blanca luchando por no desaparecer de nuevo en la negrura del mar. La luna se adivina ya por encima del fabuloso risco de Tibataje. La temperatura invita a estar aquí fuera y la noche es amena, con mil ruidos tras los setos. No ver nada con los ojos abiertos de par en par y con un chorro de vida oculta entrando a borbotones por los oídos.
Mil historias van pasando por mi cabeza mientras las nubes de todos los días ya reflejan con fuerza la luz que llega desde la luna por detrás del risco enorme.
Tu cabeza menuda con el pelo corto y moreno se pasea entre mi tejado y esas nubes. Tus ojos negros se encienden cuando me hablas de esas cosas que te gustan y que yo descubro con gran placer. Pronto las nubes han cubierto el cielo y también tu cara. Ya no la recuerdo...
Me voy dentro y cierro todo. Me duermo pensando en unos ojos negros que brillan alto. Espero que lean esto.


Canción para hoy: El Jardín de la duermevela - Nacho Vegas

4.8.06

Cerrado por vacaciones (sí, otra vez)

Canción para hoy: It must be summer - Fountains of Wayne

2.8.06

Noroeste

Regresé como cada verano desde hace tres a la aldea pequeña y olvidada por casi todos. Volvieron los niños a jugar con la vaca, el burro, las gallinas. Volvieron a saber cómo se puede vivir también sin supermercado, volví a asombrarme de que sea posible. Los animales, la huerta, la granja, los prados, el columpio bajo el castaño. La gran Carmen que carga con todo a sus espaldas y lo da todo a cambio de nada.
Volvimos a la niebla en la playa de aguas heladas, al rodeo sobre las olas y al pasodoble a mediodía en la sesión vermú. Al paseo por el puerto al anochecer, al olor a sardinas asadas que lo ocupa todo. Y a esas nieblas color rosado que duran lo que el rayo verde en el horizonte.
Vuelta a recorrer las carreteras y caminos de montañas chatas, de bosques oscuros como boca de lobo entre olor a eucalipto y laurel, carreteras para ir despacio para tener tiempo de ver, oler y elegir el camino, no el mas recto ni el más corto sino el que apetece, elegir en cada cruce, como en la vida.

Canción para hoy: Bright side of the road - Van Morrison