Buen menú (5)
Preparación: Se salpimentan los solomillos y ponen a la plancha enteros dorándolos bien por todos los lados. Una vez dorados por fuera, se cortan en medallones que se reservan para más tarde (estarán casi crudos por dentro y tostados por fuera).
Para la salsa se pone en una cazuela el vaso de vino, el zumo de medio limón y el de media naranja y se deja cocer a fuego muy lento hasta que se vaya reduciendo removiendo de vez en cuando. En una hora o quizá menos tendremos una salsa espesa y muy olorosa. Hay que estar atentos y no dejar que espese demasiado porque se puede solidificar al enfriar.
Para las patatas revolconas, se cuecen las patatas peladas y troceadas con un poco de sal y cuando están a punto se sacan y se cuelan. Se sofríen los ajos enteros machacados en una cucharada (o dos) de aceite de oliva. Al rato se echa una cucharada de pimentón de la Vera y se remueve bien. Enseguida añadimos las patatas y las machacamos con un tenedor dejándolas que se hagan y se mezclen con el aceite y el pimentón removiendo a menudo para que no se peguen.
Justo antes de servir, se da vuelta y vuelta a los medallones añadiendo una pizca de sal y se sirven en el plato con un poco de salsa (que ya estará bien espesa, como si fuera un sirope) y una buena cucharada de patatas.
Canción para hoy: Cocinero, cocinero - Antonio Molina